En un principio, ya por el año 2016, Adrián y Leyre se pusieron en contacto conmigo y confiaron en mí para poder realizar las fotos de este día tan importante para ellos, el de su boda.
Desde el día del reportaje de la preboda en el Moncayo, ya noté la conexión especial que hay entre Leyre y Adrián, y que ambos trasmiten a raudales. La fecha que eligieron para el enlace, el 24 de junio en la Finca El Marqués el Turrullón, también tiene un simbolismo para ellos, y lo aderezaron con plantas de Boj, hojas de Olivo y multitud de velas que le dieron un toque mágico a esta noche de San Juan.
Por tanto, ésta ha sido una boda muy especial, en la que he tenido la suerte de poder captar todos los momentos de la misma, y que a través de las fotos intentaré plasmar todo lo que vivimos en aquella bonita jornada.