Me gusta explicar con imágenes lo que veo a través de mis ojos, e intentar capturar esos momentos mágicos que duran un segundo al abrir y cerrar el obturador de mi cámara. Aparte de estar ahí, viviendo esos instantes, me gusta conoceros, charlar tranquilamente tomando un café donde podamos hablar de vuestros gustos, de los de vuestro hijo/a, y así poder planificar la sesión fotográfica. En los reportajes en general, y más en los de familia, me gusta documentar y narrar en imágenes todo lo que pasa, para quede un recuerdo vivo y real de esos momentos. Un recuerdo, en el que todos tienen cabida: madre, padre, hermano/a, vuestro gato o perro que son compañeros incansables; todo esto le da un plus y potencia los recuerdos cuando se vuelven a ver las fotos un tiempo después














































































































































































































